lunes, 24 de mayo de 2010

Amoratado

Con su cuerpo amoratado cosecha limones en el estercolero
y en el amor atado a otro cuerpo tiende desilusiones de recuerdos.

Y es que la decepción suele ser el hombre más violento...

Fotografía Laura Marcos.

lunes, 17 de mayo de 2010

Sólo decirte

Esta vez fueron mis ojos los que lloraron por tí.
Tú siempre fuerte, ante cualquier peligro,
ante cualquier pérdida o derrota.
Siempre serás ese guerrero de la espada de plata
que esconde su alma rota,
su mochila con los golpes de la infancia,
sus zapatillas ya cansadas de escapar.
En tu escudo de hojalata
te escribo palabras de consuelo
para que te abracen en los malos sueños
mi risa y nuestros buenos momentos,
para que mis versos acorten distancias
y paren del reloj mis segunderos.
Hoy te doy todo aquello que te di,
y vuelvo a perder la compostura y sus restos.
Y es que mi corazón de costura
desea hilarse con tu amargura
para unirse contigo de nuevo,
y decirte en silencio cuánto lo siento.

Parce que vous savez que je serai toujours là.
JTA

domingo, 16 de mayo de 2010

No me sueltes

Si miro al cielo
sé que mi retina creará lágrimas
y por eso ando cabizbaja.
Para perderme
en los asfaltos movedizos
que esconde Paris.
Agárrame fuertemente,
pues sólo tú eres capaz
de sostener mis heridas.
No me sueltes.
Nunca.
Ni en la distancia.
Ni en la penumbra.
Ni en el abismo.
No dejes que vuelva a llorar,
ni que me convierta en agua.
Que sólo quiero abrazarte.
Y reirte.
Y mirarte.
Sincera. Calladas.
Como siempre. Como antes.
Como tantas veces.

jueves, 13 de mayo de 2010

De tanto usarlo

Y se hizo invisible, para permanecer cerca de él, por siempre.
Y quiso deshacer las distancias, para ser la prolongación de sus pies.
Y le dolió tanto. Tantas veces.
Y en vez de conservar susurros se gritaron sueños al viento.
Y lloró. Y amó. Y recordó.
Y murió.
Y es que de tanto usarlo le dolía el corazón.

martes, 4 de mayo de 2010

Huida

quienes me preguntan la razón de mis viajes les contesto que sé bien de qué huyo pero ignoro lo que busco.

Molière.

Yo pensaba que no huía. Me atemorizaba la idea de reconocerlo. De reconocer que mi vida no es más que una huida sin fundamento. Huyo porque me da miedo enfrentarme con mis propios demonios, aquellos que rompen con mi silencio y me arrastran por el suelo. Huyo porque me miro en el espejo y no son alas ni cometas lo que desprendo, sino el cosquilleo de escarabajos negros que se ríen a mis espaldas cuando menos me lo espero.
Huyo, me aburro y me lamento. Creo que en nada creo, y en la nada me creo princesa de un cuento. Nado en la nada que creo, y correteo en busca de ranas que andan al compás del tiempo. Y el tiempo mata mi propio tiempo . Trabalenguas cotidianos escritos en verso.

sábado, 1 de mayo de 2010

Vuelvo a alzar el vuelo

Vuelvo a sentirte cerca,
a respirar tu aire,
a caminar en tus mismos pasos.
Dar la mano a tu viento,
y pasear despacio
por el embarcadero.
Vuelvo a abrazar a los sentimientos.

Volvemos a ir a destiempo,
a ser víctimas de los recuerdos.
Y la injusticia representa
el papel de verdugo
y me arranca la cabeza,
el alma. Mis grietas.

Vuelvo a convertirme en nada,
querer ser el soñador cuerdo
que intenta volar sin alas.